El mundo en un grano de arena

Viene el frio implacable sin importarle que los simples mortals estemos o no preparados para su llegada. Cuando en Inglaterra todo eran quejas sobre el clima, ya hiciese frio o calor, brillase el sol o callese el chapurron del siglo, aqui el discurso meteorologico es totalmente diferente. Los daneses parecen estar de lo mas emocionados con la llegada de la nieve, como si cada copo trajese un pan debajo del brazo o un motivo para estar feliz. Y es que esto de la felicidad constante danesa me tiene un poco mosqueda. En parte porque soy gallega y mi codigo genetico me impusla a la desconfianza y en parte porque vengo de estar en un pais en el que la alegria magnanera solia levanter sospechas e irritacion en los lugaregnos. Aqui es al contrario. Si no sonries a diestro y siniestro, eres raro y muy pero que muy antisocial, lo que es una especie de crimen por estos lares. La verdad es que se me van a desgastar los dientes de tanto ensegnarlos, aunque a veces no se si lo hago en segnal de apreciacion y acercamiento o de cabreo. Porque la verdad es que en Oz no todo es color de rosa. Digamos que, como Dylan solia cantar, los tiempos estan cambiando. Si no hace tanto los estereotipos eran motivo de acercamiento, de descubrimiento y curiosidad, ahora parece que vuelven con una fuerza inquitante e inusitada para establecer barreras y marcar diferencias. Yo, la verdad sea dicha, nunca fui muy amiga de los encasillamientos por eso de que su falsa universalidad nunca hace justicia a las maravillosas particularidades de cada individuo. Sin embargo, los usamos para darle sentido a ciertas cosas; el peligro reside en que a veces los secuestramos para quitarselo. En ocasiones, nuestro entendimiento peca de vagancia y se conforma con lo que otros quieren que pensemos u opinemos. William Blake, romantico como era, decia que el mundo puede verse en un grano de arena. No es un ejercicio de lo mas sencillo, pero solo require un poco de voluntad y coraje. Creo que, no solo Europa, pero el mundo entero, necesita un poco mas de valentia, de querer ver el mundo en un grano de arena y no aislarse en una playa desierta sin diversidad ni atardecers cambiantes. Necesitamos sonreir, reirnos de las adversidades que construimos y cambiar las sospechas por curiosidad y acercamiento.Si nos paramos a pensarlo…Que tenemos que perder por atrevernos e intentarlo?