Atravesar el viento sin documentos!!

La naturaleza se ha salido con la suya. Por fin se pueden ver las estrellas en un impensable cielo londinense carente de aviones surcandolo continuamente. Si Monet estuviese vivo, no descansaria hasta pintar estos atardeceres indescriptibles, cortesia de las cenizas provenientes de un volcan Islandes al que le ha dado por despertar espectacularmetnte de su letargo de doscientos agnos. La Bella Durmiente no hizo tanto ruído cuando el príncipe azul la beso.
El paron en el trafico aéreo ha dado una tregua a las alturas, pero aqui abajo las cosas se complican por momentos. Mientras observamos impotentes el avance de la nube de cenizas, turistas impacientes se aglutinan en los mostradores de sus hoteles para alargar su estancia, los aeropuertos parecen el set de 28 Dias, las mercancias que estaban listas para salir y entrar en el UK se hechan a perder en las aduanas y Eurostar ha hecho su Agosto en pleno mes de Abril.
Aqui nunca se habia visto nada igual. En lugar de centrarse en su estratégia politica de campagna electoral, Gordon Brown ha organizado una reunion de ministros para evaluar los dagnos causados por la crisis volcanica.
Se preveen erupciones de alto riesgo debido a que las perdidas econimicas ya son astronomicas. Y en esta ocasion no se le puede echar la culpa a la avaricia de los banqueros o a la corrupcion de los griegos.
La nube se ha aplicado el cuento de eliminacion de fronteras y se ha hecho con el espacio aero comunitario, creando el caos a su paso. A los Islandeses, que ya no las tenian todas consigo para llevarse un premio por su buen hacer y popularidad, tampoco se les puede culpar porque su volcan se haya puesto a hacer de las suyas...o si?
A pesar de los parones y las perdidas economicas, este domingo, el dia mas caluroso de lo que llevamos de Primavera, parece ajeno a la pesadilla. La gente pasea tranquila bajo un sol de justicia por unas calles de Londres no tan saturadas como de costumbre, y los que nos tumabamos en el parque a disfrutar del sol, miramos hacia el cielo con incredulidad, buscando algo que falta, pero que tampoco hechamos de menos.
Supongo que la tranquilidad proviene de la resignacion de aceptar que a veces la naturaleza se sale con la suya sin que nosotors podamos hacer nada por evitarlo; una especie de recordatorio de que nuestro poder y control tiene limites. Resignacion ante el hecho de que el viento, como en esa cancion de Los Rodriguez, no necesita de documentos para atravesar fronteras.